Una oportinidad más

Esta foto escenifica el nuevo intento de poner paz en la zona mas caliente de este planeta. La paz entre israelíes y palestinos es deseada por casi todo el mundo como una muestra de que las cosas pueden ir evolucionando en este planeta. Un proceso encallado, con momentos de mayor acritud y con momentos de una calma tensa.

Son los últimos meses de George Bush al frente de la administración de los Estados Unidos, y quiere limpiar un poco su desastrosa gestión, principalmente en política internacional, con una intentona más de lo que supondría un hecho histórico que ya muchos presidentes de muchos países han intentado.

No ha sido fácil en ningún momento, de hecho la zona está como está, y no parece que esta lo vaya a ser más. Quizá analizando la coyuntura que rodea a esta cumbre podemos evaluar las posibilidades de que el proceso culmine con al menos un poco de empuje.

En primer lugar, y como valoración personal, no confío en la pericia intelectual ni diplomática de Bush para poner paz en un sito tan complicado como oriente medio. Es como llevar al pirómano a apagar el incendio. Pero queda el consuelo que quizá haya mucha gente detrás que, aunque sin buenas intenciones, puedan conocer mejor estos entresijos y llevar al presidente a hacer lo apropiado en ese momento.

Segundo, y quizá lo mas llamativo de todo, es que esta nueva intentona se lleva a cabo sentando frente a frente a dos lideres, Ehud Ólmert y Mahmud Abbas, que son posiblemente los mas débiles de los últimos años. Esto supone un problema, no para llegar a acuerdos, si no para después llevar estos acuerdos a la práctica en Israel y Palestina respectivamente. No tendrán fácil liderar en sus países le revolución que puede suponer poner en práctica lo acordado.

En tercer lugar, y como mayor problema, es la situación social vivida principalmente en Palestina. Con una sociedad dividida, ya no sólo físicamente, sino sentimental y socialmente. Gaza controlado por Hammas, y Cisjordania controlado por Fatah. Las dos facciones mayoritarias en Palestina y cada vez mas rivales, hacen imposible que los acuerdos firmados por el Presidente de la Autoridad Palestina sean aceptados por sus rivales políticos. La situación de aislamiento de Gaza, donde Hammas es el heroe de la resistencia, llena de más y más odio a los palestinos de la franja, provocando de esa manera que si el proceso no prospera se le pueda echar la culpa a los palestinos. Es el cuento de siempre.

Como conclusión, sólo cabe esperar que este sea el momento, que por lo difícil, sea el que mas motive a todas las partes. Pero no debemos olvidar que la solución pasa, inexorablemente, por la creación y reconocimiento del estado palestino. Un estado palestino que deberá ir creciendo democráticamente poco a poco para evitar cualquier tipo de sobresalto.